lunes, 15 de febrero de 2010

La historia de Rama (El Ramayana)

Su nombre significa, «los viajes del Señor Rama». Fue escrito en sánscrito por el sabio Valmiki.
Está compuesto por 24.000 versos divididos en seis kandas o libros. La historia inicia desde
cuando el rey Dasaratha, estando casado con sus tres esposas, Kaushalya, Kaikeyi y Sumitra, no
había logrado concebir ningún hijo. Entonces organizó un gran sacrificio de fuego para lograr
engendrar alguno. De aquel sacrificio surgió un ser místico que le entregó una vasija llena de
arroz, néctar enviado del cielo. Sus mujeres debían comerlo. Kaushalya, por ser la mayor de las
esposas, recibió la mitad de la cantidad arroz y las otras dos esposas el resto. Sumitra, a su vez,
dividió su parte en dos porciones más. Con el paso del tiempo, Kaushalya tuvo un hijo llamado
Rama; Kaikeyi tuvo a Bharata; y de Sumitra nacieron Lakshmana y Satrughna.
Con el tiempo, Rama se casó con Sita. Janaka, el padre de Sita, había organizado una
competición para elegir un esposo digno de su hija. La prueba consistía en levantar el pesado
arco del Señor Shiva y luego, tensarlo. Ninguno de los guerreros allí presentes consiguió
hacerlo, excepto Rama que lo levantó y sin dificultad alguna tensó el arco tan fuerte que se
partió en dos. Debido a que Rama es Vishnu y Sita es Lakshmi, este matrimonio ya estaba
predestinado.
A su debido tiempo, el rey Dasaratha decidió retirarse como gobernante de Ayodhya y cederle
el trono a su hijo mayor Rama. En vísperas de la coronación, Kaikeyi, la más joven de sus
esposas, manipulada y mal aconsejada por su sirviente Manthara, pidió al rey que coronara a su
hijo Bharata y que enviara a Rama al bosque desterrado durante catorce años. Dasaratha se vio
obligado a aceptar esta propuesta porque en el pasado le había prometido que satisfaría
cualquier deseo suyo por haberle salvado la vida.
De esta forma, Rama, junto con su fiel esposa, Sita, y su hermano Lakshmana fueron al bosque
a cumplir el tiempo de su destierro. Cuando Bharata se percató de esta situación fue a buscar a
Rama para que regresara a reinar. Rama no aceptó porque deseaba cumplir la promesa de su
padre.
Mientras estaban en el bosque, Ravana, el malvado rey de Lanka, raptó a Sita y se la llevó a su
reino. Rama y Laksmana comenzaron una larga búsqueda tratando de encontrarla. Se
encontraron con Sugriva, el rey de los vanaras y su ministro Hanuman. El gran Hanuman
encontró a Sita en Lanka. Rama y Lakshmana junto con sus aliados, un ejército compuesto por
monos y osos, atacaron la ciudad de Lanka después de haber cruzado un puente de piedras
flotantes en el océano. Después de muchas batallas, Ravana, el demonio de diez cabezas fue
muerto por Rama y Sita fue finalmente liberada. Rama volvió a Ayodhya donde fue coronado
rey.
El Ramayana es uno de los textos sagrados más importantes para los hindúes y se suele recitar
durante todo el año, aunque muy especialmente durante el Rama-navami, el día de la
celebración de la aparición del Señor Rama y durante el diwali, la festividad que conmemora el
retorno de Rama después de 14 años de destierro.

Sri Rama es Dios encarnado, la séptima encarnación de Vishnu. Quien decidió volverse humano
y durante un tiempo olvidar su divina identidad. Por recuperar a su esposa Sita, tuvo que luchar
muchas batallas y enfrentarse a muchos demonios. Los viajes de Rama también son un reflejo
del viaje que cada alma hace. Al igual que Rama, nosotros sufrimos en nuestras propias vidas:
perdidas, desilusiones, destierros y a veces también aceptamos que a través de estas
experiencias podemos redimirnos y mejorar como personas. Las penurias que sufre Rama, de
una forma también son las nuestras, aunque las de El son en un contexto divino.
El tema principal del Ramayana es la eterna lucha del bien y el mal, la luz y la oscuridad, y las
consecuencias de nuestros actos pasados. En el Ramayana nos encontramos con el sacrificio de
la libertad en nombre del deber y el honor. El amor además de un sentimiento, demanda de un
servicio, la devoción de Rama por Sita y de esta por Rama, por sus súbditos, por su padre. El
amor trasciende status sociales, razas e incluso especies, el devoto más grande de Rama, es un
mono llamado Hanuman, símbolo de la devoción eterna y entrega total al supremo. En el
Ramayana también nos encontramos con el ejemplo de la vida sencilla en el bosque y los
primeros pasos de la ecología, “vida sencilla con pensamiento elevado” donde Sri Rama se
adapta a la nueva situación de vivir en el bosque a pesar de ser un príncipe.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias hermano ángel de mi vida por hacerme conocer este libro alimento de enceguecedora belleza.

Luz y amor!

fer